Denme golpes

Denme golpes en el pecho,
zumben trastes y basuras,
la impaciencia es derecho
si les narro desventuras.

Soy medroso, soy perjurio
de tres reyes muy ladinos
que dejándome lo espurio
abrevaron mis espinos.

Señora, jardín con amo,
no me diga indeseable,
su señor bifurca el tramo
y traspasa con un sable.

Mis amores hallan cierta
hermandad con lo imposible,
el perfíl que en la antepuerta
entrevé lo más sensible.

Denme golpes en el pecho,
zumben trastes y basuras,
sus chiflazos son derecho
si les narro mis locuras.

Gracias por visitarme.